Capítulo # 4: La asignación internacional
4.1 La Asignación Internacional[1]
Objetivos de aprendizaje
- Describir cómo prepararse para una asignación internacional.
- Discutir el proceso de aculturación como expatriado.
- Describir estrategias efectivas para vivir y trabajar en el extranjero.
Supongamos que tienes la oportunidad de trabajar o estudiar en un país extranjero. Es posible que la perspectiva de una asignación internacional sea intrigante, desafiante o incluso aterradora; de hecho, la mayoría de los profesionales empleados en el extranjero le dirán que pasan por las tres etapas en algún momento durante la tarea. También pueden compartir su sentido de ajuste, incluso abrazar su cultura de acogida, y los desafíos de la reintegración en su país natal.
Una asignación internacional, ya sea como estudiante o profesional de carrera, requiere trabajo y preparación, y se le debe dar el tiempo y la consideración de cualquier cambio importante en la vida. Cuando pierdes a un ser querido, lleva tiempo llegar a un acuerdo con la pérdida. Cuando alguien que amas es diagnosticado con una enfermedad grave, la noticia puede tardar algún tiempo en hundirse. Cuando un nuevo bebé ingresa a tu familia, un periodo de ajuste es predecible y prolongado. Todos estos grandes cambios en la vida pueden estresar a un individuo más allá de su capacidad de ajuste. Del mismo modo, para ser un “expatriado” exitoso, o expatriado, uno necesita prepararse mental y físicamente para el cambio.
Las asignaciones de negocios internacionales son un reflejo del aumento del comercio global, y a medida que disminuye el comercio, pueden convertirse en un lujo costoso. Como la tecnología permite la comunicación instantánea cara a cara y la colaboración grupal en documentos a través de la computación en la nube y el almacenamiento, la necesidad de viajes físicos puede reducirse. Pero independientemente de si tu asignación implica reubicación en el extranjero, supervisión de gerentes en otro país a distancia o supervisión por parte de un gerente extranjero, necesitarás aprender más sobre el idioma, la cultura y las costumbres que no son las tuyas. Necesitarás comparar y contrastar, y buscar experiencias que aporten perspicacia, para poder comunicarte de manera más efectiva.
Un gerente eficiente y efectivo en cualquier país es deseable, pero uno con experiencia internacional aún más. Representarás a tu empresa y ellos te representarán, incluyendo una inversión financiera considerable, ya sea por tu patrón (en el caso de un encargo profesional) o por quien esté financiando tu educación (en el caso de estudiar en el extranjero). Esa inversión no debe tomarse a la ligera. Hasta el 40 por ciento de los empleados asignados en el extranjero terminan sus asignaciones anticipadamente (Tu, H. y Sullivan, S., 1994), con un costo considerable para sus empleadores. De los que quedan, casi el 50 por ciento son menos que efectivos (Tu, H. y Sullivan, S., 1994).
Preparación
Con esta perspectiva en mente, discutamos cómo prepararnos para el encargo internacional y estrategias para convertirte en un profesional más efectivo como extraño en una tierra extraña. Primero disiparemos un par de mitos asociados a una visión idealizada o romántica de vivir en el extranjero. A continuación examinaremos los rasgos y habilidades del expatriado exitoso. Finalmente, examinaremos el choque cultural y el proceso de aculturación.
Tu experiencia con otras culturas puede haber sido de primera mano, pero para la mayoría, un lugar extranjero como México es una idea formada a partir de la exposición a imágenes a través de los medios de comunicación. México puede ser conocido por sus mariachis, por el arte de Frida Kahlo, como un lugar de ruinas Mayas o por la importancia del Día de los Muertos. Pero si solo has sabido de un lugar a través de la lente de una cámara, solo has visto los retratos diseñados y retratados por otros. Te faltará la visión multidimensional de quien vive y trabaja en México, y aunque seas consciente de su historia, su desarrollo económico, o sus cambios recientes, todas estas son observaciones académicas hasta el momento de la experiencia.
Eso no quiere decir que la investigación no forme una base sólida en preparación para una asignación internacional, sino que sí refuerza la distinción entre un ideal fabricado en medios y la vida real. La conciencia de esta diferencia es un paso importante a medida que te preparas para la vida en una cultura extranjera.
Si la decisión es tuya, tómete su tiempo. Si otros están involucrados, y la familia es una consideración, debes tener aún más cuidado con esta importante decisión. La residencia en el extranjero requiere cierto conocimiento del idioma, una capacidad de adaptación y un interés por aprender sobre diferentes culturas. Si los miembros de la familia no forman parte de la decisión, o carecen de las habilidades lingüísticas o el interés, la tarea puede resultar abrumadora y llevar al fracaso. El sesenta y cuatro por ciento de los encuestados expatriados que terminaron su asignación temprano indicaron que las preocupaciones familiares fueron la razón principal (Contreras, C. D., 2009).
Entre los puntos a considerar figuran los siguientes:
- ¿Qué tan flexible eres?
- ¿Necesitas todo deletreado o puedes ir con la corriente?
- ¿Te puedes adaptar a nuevas formas de hacer negocios?
- ¿Te interesa la cultura anfitriona y estás dispuesto a dedicar el tiempo y poner el esfuerzo para aprender más sobre ella?
- ¿Cuál ha sido tu experiencia hasta la fecha trabajando con personas de distintas culturas?
- ¿Cuáles son tus habilidades lingüísticas en la actualidad y te interesa aprender un nuevo idioma?
- ¿Su familia es solidaria con la tarea?
- ¿Cómo afectará la educación de tus hijos? ¿La carrera de tu cónyuge? ¿Tu carrera?
- ¿Esta asignación beneficiará a tu familia?
- ¿Cuánto tiempo estás dispuesto a comprometerte con la tarea?
- ¿Qué recursos hay disponibles para ayudarte a prepararte, moverte y ajustarte?
- ¿Puedes destacar estar fuera del circuito, aunque estés en comunicación diaria escrita y oral con la oficina en casa?
- ¿Cuál es su relación con su empleador, y puede soportar el estrés y la tensión anticipados que resultarán ya que no todo va según lo planeado?
- ¿El marco cultural de tu tarea es similar o no al tuyo, y qué tan listo estás para adaptarte a las diferencias en áreas como el horizonte temporal, la masculinidad versus la feminidad o los estilos de comunicación directos versus indirectos?
Esta lista de preguntas podría continuar, y siéntete libre de agregar las tuyas propias mientras exploras la idea de una tarea internacional. Una asignación internacional no es como una mudanza doméstica o reasignación. Dentro del mismo país, aunque existan costumbres locales significativamente diferentes, existen reglas similares, leyes y formas de hacer negocios. En un país extranjero, perderás esas tradiciones e instituciones familiares y tendrás que aprender muchas formas nuevas de cumplir tus tareas dadas. Lo que una vez tomó una llamada telefónica de cinco minutos ahora puede tomar una docena de reuniones y un mes para lograr, y eso puede causarte cierta frustración. También puede causar frustración a tu empleador mientras intentas comunicar cómo se hacen las cosas a nivel local y por qué los resultados no son inmediatos, ya que carecen incluso de tu comprensión limitada de tu contexto actual. Tu relación con tu empleador experimentará estrés, y tu capacidad para comunicar tu situación requerirá tacto y delicadeza.
Los expatriados exitosos son adaptables, abiertos a aprender nuevos idiomas, culturas y expertos en encontrar un terreno común para la comunicación. En lugar de responder con frustración, aprenden las nuevas costumbres y encuentran la ventaja para hacer el trabajo. Forman relaciones y no tienen miedo de pedir ayuda cuando se justifica o se requiere. Se sienten seguros en su lugar como exploradores, y entienden que los errores son un hecho, aun cuando son impredecibles. Ser un extraño no es tarea fácil, pero dan la bienvenida al reto con energía y entusiasmo.
Proceso de aculturación
La aculturación, o la transición a vivir en el extranjero, a menudo se describe como una montaña rusa emocional. Steven Rhinesmith proporciona diez pasos que muestran el proceso de aculturación, incluido el choque cultural, que puede experimentar:
- Ansiedad inicial
- Elosión inicial
- Choque inicial de cultivo
- Ajuste superficial
- Depresión-frustración
- Aceptación de la cultura huésped
- Ansiedad de retorno
- Elosión de regreso
- Choque de reentrada
- Reintegración
Los humanos temen a lo desconocido, e incluso si tu tolerancia a la incertidumbre es alta, puedes experimentar cierto grado de ansiedad en anticipación a tu llegada. Al principio se observa el periodo de “luna de miel”, con una sensación de alegría ante todas las maravillas recién descubiertas. Puedes ajustarte superficialmente al principio, aprendiendo dónde obtener alimentos familiares o nuevas formas de satisfacer tus necesidades básicas. Al vivir en la nueva cultura, la divergencia se convertirá en tendencia y notarás muchas cosas que te frustran. No anticiparás la necesidad de dos horas en un banco para una transacción que una vez tardó cinco minutos, o podría manejarse a través de Internet, y descubrirá que los negocios cierran durante el mediodía, impidiendo que logres tus objetivos. En esta etapa, sentirás que vivir en esta nueva cultura es simplemente agotador. Muchos expatriados aconsejan que este es el momento de aguantarlo, si cedes a la tentación de hacer una visita en casa, solo prolongarás tu difícil ajuste.
Con el tiempo, si perseveras, llegarás a aceptar y adaptarte a tu cultura anfitriona, y aprenderás a lograr tus metas con menos frustración y facilidad. Puedes llegar a apreciar varios valores o rasgos culturales y llegar a abrazar algunos aspectos de tu cultura anfitriona. En algún momento, necesitarás regresar a tu primera cultura, o a tu hogar, pero esa transición traerá una sensación de ansiedad. La gente y los lugares cambian, lo familiar ya no es tan familiar, y tú también has cambiado. Es posible que una vez más te sientas exaltado con tu regreso y lo familiar, y experimentes una sensación de comodidad en el hogar y la familia, pero el choque cultural puede volver a ser parte de tu ajuste. Puedes mirar tu cultura de una manera nueva y cuestionas las cosas que se hacen de una manera particular que siempre has considerado normales. Puedes conservar algunos de los rasgos culturales que adoptaste mientras vivías en el extranjero y comenzar el proceso de reintegración.
También puedes comenzar a sentir que el “pasto es más verde” en tu país anfitrión, y anhelar regresar. Los expatriados suelen ser conocidos por “volverse nativos” o adoptar la forma de vida de la cultura anfitriona, pero incluso los expatriados más confirmados aún se reúnen para escuchar el sonido familiar de su primer idioma y encontrar comunidad en personas como ellos que han mezclado fronteras culturales a nivel personal.
Vivir y trabajar en el extranjero
Para aprender a nadar hay que meterse en el agua, y toda la investigación y preparación no puede tomar el lugar de la experiencia directa. Tu conciencia del choque cultural puede ayudarte a adaptarte, y tu preparación al aprender algo del idioma te ayudará, pero debes saber que vivir y trabajar en el extranjero requiere tiempo y esfuerzo. Aún así, hay varias pautas que pueden servirte bien a medida que comienzas tu nueva vida en una tierra extraña:
- Se abierto y creativo. La gente comerá alimentos que parezcan extraños o harán las cosas de una manera nueva, y tu apertura y creatividad pueden jugar un papel positivo en tu ajuste. Permanecer cerca de su vivienda o rodearse de expatriados similares puede limitar tu exposición y comprensión de las culturas locales. Si bien lo familiar puede ser cómodo, y el nuevo entorno puede ser incómodo, aprenderás mucho más sobre tu cultura anfitriona y de ti mismo si haces el esfuerzo de estar abierto a nuevas experiencias. Estar abierto implica salir de tu zona de confort.
- Se autosuficiente. Las cosas que alguna vez fueron fáciles o que llevaban poco tiempo ahora pueden ser desafiantes o consumir todo el día. Concéntrate en tu capacidad para resolver problemas, aprender nuevas formas de hacer el trabajo y estar preparado para hacer cosas nuevas.
- Mantén una perspectiva equilibrada. Tu cultura anfitriona no es perfecta. Los humanos no son perfectos, y tampoco lo fue tu cultura hogareña. Cada ubicación y comunidad cultural tiene fortalezas de las que puedes aprender si estás abierto a ellas.
- Se paciente. Tómate tu tiempo, y ten en cuenta que un periodo de silencio es normal. Las clases de idiomas del libro de texto solo proporcionan una base a partir de la cual aprenderás cómo se comunican realmente las personas que viven en el país anfitrión. No aprendiste a caminar en un día y tampoco aprenderás a navegar con éxito esta cultura de la noche a la mañana.
- Se alumno y profesor. Estás aprendiendo como el nuevo miembro de la comunidad, pero como miembro de pleno derecho de tu cultura, también puedes compartir tus experiencias.
- Se un explorador. Sal y ve más allá de tus límites cuando te sientas seguro y protegido. Viajar a los pueblos de los alrededores, o a través de las fronteras vecinas, puede ampliar tu perspectiva y ayudarte a aprender.
- Protéjete. Siempre mantén todos tus documentos esenciales, dinero y medicamentos cerca de ti, o donde sepas que estarán seguros. Tratar de obtener un medicamento en un país donde no domines el idioma, o donde los nombres de los remedios son diferentes, puede ser un desafío. Tu pasaporte es esencial para tu seguridad y necesitas mantenerlo seguro. También puede considerar los registros de vacunación, certificados de nacimiento o documentos comerciales de la misma manera, manteniéndolos seguros y accesibles. Es posible que debas considerar poner en una “bolsa para insectos”, todos los elementos esenciales que necesitas, incluidos alimentos, agua, llaves y herramientas pequeñas, como parte esencial de la planificación en caso de emergencia.
Conclusión clave
La preparación es clave para una asignación internacional exitosa. Vivir y trabajar en el extranjero requiere tiempo, esfuerzo y paciencia.
Ejercicios
- Investiga una organización en un negocio o industria que se relacione con tu especialidad y tenga presencia internacional. Encuentra un anuncio de empleo o documento similar que discuta el negocio y sus actividades internacionales. Comparte y compara con compañeros de clase.
- Realiza una búsqueda en redes de expatriados, incluido el foro en línea. Describe brevemente tus hallazgos y compártelos con tus compañeros de clase.
- ¿Cuál sería la parte más difícil de una asignación en el extranjero para ti y por qué? ¿Cuál sería la parte más fácil de una asignación en el extranjero para ti y por qué?
- Encuentra un anuncio para una asignación internacional. Anota las calificaciones, y comparte con los compañeros de clase.
- Encuentra un artículo u otro relato en primera persona de la experiencia de alguien en una tarea internacional. Comparte tus resultados con tus compañeros de clase.
Referencias
Contreras, C. D. (2009). ¿Debería aceptar la asignación internacional? BNET. Recuperado de http://findarticles.com/p/articles/mi_qa5350/is_200308/ai_n21334696.
Rhinesmith, S. (1984). Regresando a casa. Ottawa, Canadá: Oficina Canadiense para la Educación Internacional.
Tu, H., & Sullivan, S. (1994). Horizontes empresariales. Recuperado de http://findarticles.com/p/articles/mi_m1038/is_nl_v37/ai_14922926.
- Esta sección está adaptada del texto tomado de 1.1 La Asignación Internacional de Anonymous tiene licencia CC BY-NC-SA 4.0. ↵